Si tienes antecedentes familiares de demencia en tu familia o si cuidas a una persona con demencia, la información presentada en este artículo te será de vital utilidad.
Es común pensar que a medida que envejecemos, iremos perdiendo facultades mentales, más aún si eso le sucedió a nuestros padres o abuelos.
Sin embargo, investigaciones actuales han concluido que la demencia no es una consecuencia inevitable del envejecimiento, y que podemos prevenir o al menos retrasar su aparición.
¿Qué es la demencia?
Según la OMS, la demencia es un síndrome neurodegenerativo, que implica el deterioro de la memoria, el intelecto, el comportamiento y la capacidad para realizar actividades de la vida diaria (1)
La enfermedad de Alzheimer, que es la forma más usual de demencia, acapara entre un 60% y un 70% de los casos.
La enfermedad de Alzheimer, que es la forma más usual de demencia, acapara entre un 60% y un 70% de los casos.
¿Se puede prevenir la demencia?
Para la alegría de muchos, la respuesta corta es sí, pero involucra la incorporación de cambios en nuestro estilo de vida, los cuales debemos mantenerlos en el tiempo.
Así, concluyó un estudio publicado en la revista Neurology, (2) donde se evidenció que la implementación de pautas saludables en el estilo de vida, son capaces de reducir hasta un 60% las posibilidades de desarrollar demencia.
¿Qué debo hacer para prevenir la demencia?
1) Hacer actividad física: ya es algo muy conocido, pero siempre es bueno recordar que hacer actividad física en forma regular provoca un aumento del flujo sanguíneo, mejora la oxigenación y el aporte de glucosa a nivel cerebral, además de activar factores de crecimiento que promueven un aumento en la densidad capilar cerebral (3)
Es decir, mientras más actividad física hagamos, nuestro cerebro permanecerá más joven, previniendo la pérdida de memoria.
Es importante que comiences a moverte más, toda actividad física cuenta, lo importante es fomentar el hábito.
Comienza con solo caminar 10 minutos cada día, luego puedes aumentar el tiempo de manera progresiva, hasta lograr caminar 40 minutos, los cambios los comenzarás a notar rápidamente.
Si deseas una guía más completa, puedes acceder al programa completo de 30 días de ejercicios en casa aquí.
2) Comer mejor, ya hemos hablado bastante en este blog sobre como una buena alimentación puede ayudarnos a ser cada día más saludables, pero también es vital para prevenir enfermedades degenerativas como la demencia, e incluso, enlentecer su evolución si ya ha comenzado su avance.
Los investigadores de este estudio, llegaron a la conclusión de que incluir más alimentos de origen vegetal, como vegetales, frutas, legumbres, y cereales integrales, mientras se disminuye el consumo de grasas saturadas y grasas trans presentes en alimentos de origen animal y ultraprocesados, es clave para preservar nuestra memoria a largo plazo.
En pocas palabras, seguir una alimentación basada en plantas sin procesar.
Date la oportunidad de comenzar una alimentación basada en plantas hoy, descarga nuestro libro gratuito, el secreto mejor guardado para recuperar tu salud, incluso cuando tu médico te ha dicho que no tienes remedio.
3) Evitar fumar, cuando fumamos generamos daño a nuestras arterias, las cuales se hacen cada vez más duras, dificultando el transporte de oxígeno a todos los tejidos, en especial al cerebro.
Si has fumado toda tu vida, pero si dejas de hacerlo hoy, el riesgo de contraer demencia baja de manera significativa, al igual que el riesgo de sufrir de hipertensión, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
Si necesitas ayuda para dejar de fumar, te recomendamos el método 12 pasos para dejar de fumar.
4) Moderar el consumo de alcohol, se ha demostrado que el limitar el consumo de alcohol puede ayudarte a mejorar tu salud cognitiva.
La mejor recomendación que podemos hacerte es que no consumas licor, y si lo haces que sea en la dosis más baja posible.
5) Realizar actividades que desafíen tu cerebro, no se trata solamente de hacer sopas de letras o descifrar un crucigrama, aunque ayuda bastante.
La idea es realizar cualquier actividad que te haga pensar, que te motive a aprender cosas nuevas y que te haga feliz, desde apuntarte a un curso de pintura, hasta inscribirte en un curso de idiomas.
Busca aquellas actividades que puedas hacer en casa, o con amigos, y proponte como meta dedicarte al menos 10 minutos de tu complicado día a hacerlas.
Aquí te dejo una serie de ideas:
1) Aprender un nuevo idioma2) Cepillarte con tu mano no dominante
3) Aprender a tocar un instrumento
4) Inscribirte en clases de baile
5) Practicar meditación, por solo poner algunas.
Comienza a efectuar cambios en tu estilo de vida hoy mismo, mañana podría ser demasiado tarde.
Nadie debería de perder sus mejores recuerdos, si deseas que te llevemos de la mano en tu cambio de hábitos, apúntate al Cambia tu comida, cambia tu vida, una guía de alimentación basada en plantas.
Comparte esta información con tus amigos y familiares, ¡Ayúdanos a salvar vidas!
Referencias:
1) Oms, apartado sobre demencia: https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/dementia#:~:text=Datos%20y%20cifras,actividades%20de%20la%20vida%20diaria.&text=La%20enfermedad%20de%20Alzheimer%2C%20que,un%2070%25%20de%20los%20casos.
2) Estilo de vida saludable y el riesgo de demencia de Alzheimer Hallazgos de 2 estudios longitudinales. Klodian Dhana , Denis A. Evans , Kumar B. Rajan , David A. Bennett , Martha C. Morris Neurología julio de 2020, 95 (4) e374-e383; DOI: 10.1212/WNL.0000000000009816
https://n.neurology.org/content/95/4/e374
3) Miranda,
Arnoldo, Gómez-Gaete, Carolina, & Mennickent, Sigrid. (2017). Role of Mediterranean diet on the prevention
of Alzheimer disease. Revista médica de Chile, 145(4), 501-507. https://dx.doi.org/10.4067/S0034-98872017000400010
https://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0034-98872017000400010&script=sci_arttext&tlng=en
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